Cubiertas y fachadas vegetales

Escrito por Cristina García-Ochoa Martín Escrito el Martes, 20 Enero 2015. Categorías: Eficiencia energética

Cubiertas y fachadas vegetales

Una cubierta o fachada vegetal es aquella que está total o parcialmente cubierta de vegetación que crece en un medio de cultivo apropiado. No se trata de plantar en macetas sino de cambiar de tecnología creando superficies nuevas que mejoran el hábitat y ahorran consumo de energía.

Aunque parece tratarse de una tendencia moderna, los países escandinavos han usado techos verdes desde hace siglos. La corriente actual comenzó cuando Alemania desarrolló los primeros ejemplos en la década de 1960, difundiéndose después a muchos otros países europeos, algunos de los cuales, como Austria o Suiza, incentivan la instalación de este tipo de superficies.

cubiertas vegetalesLas cubiertas vegetales, además de cumplir con las funciones tradicionales de proteger, impermeabilizar y aislar tanto térmica como acústicamente, ofrecen protección frente a la radiación solar y aprovechan el efecto amortiguador de la temperatura que la tierra tiene gracias a su inercia térmica, reduciendo la pérdida y ganancia excesiva de calor a través de la superficie.

Las envolventes vegetales mejoran además el microclima del lugar en que se ubican al convertirse las superficies en lugares mucho más frescos con plantas que aportan humedad y mejoran la calidad del aire al absorber CO2 y proporcionar O2. Para asegurar su correcto mantenimiento es necesario elegir plantas que se adapten a condiciones climáticas duras, como sequías, fuertes vientos, lluvias intensas o heladas.

En cuanto a su funcionamiento térmico hay que resaltar que estas superficies actúan como un sistema de aislamiento natural, regulando la temperatura del edificio, lo que permite disminuir el consumo de los sistemas de climatización. Algunos expertos aseguran que la variación de temperaturas diarias se reduce en un 50%, especialmente si son ubicadas en paredes expuestas al sol. Asimismo, la demanda de calefacción se reduce en un 25% sólo por su capacidad de evitar en un 75% el frío causado por el viento. Además, las cubiertas y fachadas verdes reducen el impacto del ruido externo y de fenómenos atmosféricos intensos como chaparrones o granizadas.

fachada vegetalContar con una fachada de este tipo permite mejorar estéticamente el edificio, ganando la ciudad un espacio vivo que cambia con las estaciones y que es hábitat para invertebrados como insectos y arañas, que a su vez son alimento de pájaros. En definitiva, es una opción sostenible que permite ahorrar energía y llevar la naturaleza de vuelta a las ciudades.

 

Fuentes: Web vivirhogar.es y consumer.es

Sobre el autor

Cristina García-Ochoa Martín

Cristina García-Ochoa Martín

Gestora de proyectos de innovación del Centro de Innovación de Infraestructuras Inteligentes (CI3). (@CristinaGOchoa)